Conectividad, libertad de expresión y Estado de derecho en América Latina

Capítulo.  

Cruz-Silva, J., Cruz-Isidoro, C., López-Paredes, M. (2025). Conectividad, libertad de expresión y Estado de derecho en América Latina. En López-Paredes, M. (Ed.) Competencias mediáticas en estudiantes universitarios de la red AUSJAL: Estudio de caso en el contexto latinoamericano (pp. 209-223). PUCE, Centro de Publicaciones.

Internet se ha convertido en un elemento indispensable para la vida diaria de las personas. El acceso a la red habilita el ejercicio de derechos humanos como el acceso a la información, la libertad de expresión, educación, salud o cultura. Más allá de la dimensión tecnológica, hablamos de un espacio social, económico y cultural que permite el cierre de brechas en la sociedad del conocimiento.

La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha planteado que el acceso universal a las tecnologías de la información y comunicación (TIC) se refiere “a la necesidad de garantizar la conectividad y el acceso universal, ubicuo, equitativo, verdaderamente asequible y de calidad adecuada, a la infraestructura de Internet y a los servicios de las TIC, en todo el territorio de los Estados”

El análisis de los tres principales indicadores democráticos muestra que América Latina es una región de grandes contrastes en cuanto a la calidad de sus democracias. Algunos países, como Uruguay, Costa Rica y Chile, han logrado consolidar democracias estables, con altos niveles de libertad de prensa, baja corrupción y respeto por el Estado de derecho.

Sin embargo, otras naciones como Venezuela, Nicaragua y Honduras enfrentan serios retrocesos democráticos. La represión de la libertad de expresión, la corrupción desenfrenada y el debilitamiento del Estado de derecho han llevado a una profunda crisis institucional en estos países. Los países en situaciones intermedias, como México, Colombia y Brasil, enfrentan grandes desafíos en su lucha contra la corrupción y la violencia, aunque muestran ciertos avances en aspectos como la transparencia gubernamental.

En conclusión, América Latina sigue siendo una región en la que la lucha por la consolidación democrática está en curso. Los países con mayores avances ofrecen modelos a seguir, mientras que aquellos en crisis necesitan reformas profundas y el fortalecimiento de sus instituciones para garantizar la estabilidad y el respeto de los derechos fundamentales.